El exdirector de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), Olmedo López, firmó un preacuerdo con la Fiscalía General de la Nación, admitiendo su participación en un esquema de corrupción que implicaba peculado por apropiación y concierto para delinquir. Como resultado, el exfuncionario se enfrenta a una pena de al menos siete años de cárcel y deberá devolver la suma de $724 millones de pesos.
La investigación de la Fiscalía reveló que López, nombrado en el cargo durante el gobierno del presidente Gustavo Petro, junto a Sneyder Pinilla, estuvo involucrado en el direccionamiento de contratos a empresas de aliados a cambio de sobornos, un acuerdo que ascendió a $5.342 millones de pesos. Según la fiscal encargada del caso, López y Pinilla favorecieron la asignación de ocho contratos a cambio de comisiones.
El caso también ha salpicado a figuras políticas de alto perfil, incluyendo al senador Iván Name del Partido Verde y al exrepresentante Andrés Calle. Ambos habrían recibido parte de los sobornos gestionados por López y Pinilla. Además, se mencionó a Carlos Ramón González, quien supuestamente ordenó los pagos desde la Dirección Nacional de Inteligencia, y al ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, por autorizar el presupuesto de la UNGRD para dichos fines.
Este escándalo ha generado un impacto en la opinión pública y en el Gobierno, dado que involucra a varios actores políticos y funcionarios de alto rango. La Fiscalía ha continuado su investigación, con nuevas audiencias programadas para esclarecer todos los detalles de la trama y determinar la responsabilidad de cada implicado.
López, al firmar el preacuerdo, busca una reducción de su condena al admitir los cargos y colaborar con la justicia. Sin embargo, las implicaciones del caso siguen extendiéndose a otras figuras importantes, lo que podría desatar nuevas repercusiones en el panorama político.
