El móvil del homicidio de Jamir Enrique Palacios Pérez, de 34 años, conductor de bus de servicio público de la empresa Sobusa aún no se esclarece, la Policía Metropolitana de Barranquilla inició la investigación pertinente y al tiempo descató el robo como una posible causa del asesinato.
«Tras recoger el testimonio de un testigo y hacer el análisis de la escena del crimen, se analizaron varias líneas investigativas que apuntan a móviles distintos al hurto ya que en el lugar quedaron las pertenencias del ahora fallecido», dijo la Policía en una misiva enviada a los medios.
El mismo texto añadió que «el delincuente que disparó huyó en una motocicleta que lo esperaba cerca del lugar del crimen» .
La víctima falleció de forma instantánea de un balazo en la cabeza, y, según la Policía, no le hurtaron nada.
Ante tal afirmación, la pregunta lógica que surge de manera natural. ¿Fue entonces extorsión el motivo del crimen?.
Tesis que fue desmentifa por la firma. El gerente operativo de Sobusa, Jhon Jairo Ospina negó en el noticiero Atlántico en Noticias que la empresa esté siendo objeto de extorsiones por parte de la delincuencia.
«La pregunta que nos hacen es que si hemos recibido alguna llamada extorsionandonos. Negativo, no hemos recibido absolutamente nada. No sabemos de donde proviene esta situación…»
El crimen se produjo en el municipio de Soledad, en la prolongación de la calle Murillo.
La Policía Metropolitana de Barranquilla realiza las indagaciones correspondientes para esclarecer este hecho criminal. Mientras se desmienten de manera diplomática Policía y firma transportadora, una familia suminda en el dolor por esta tragedia, continúa sin respuestas.