El viernes 3 de noviembre, el Ejército de Liberación Nacional (ELN) anunció mediante un comunicado el inicio del proceso de liberación de Luis Manuel Díaz, padre del futbolista guajiro Luis Díaz. El secuestro de Díaz tuvo lugar el 28 de octubre en Barrancas, La Guajira, y tras verificar su parentesco con el destacado deportista del Liverpool, el Frente de Guerra Norte del ELN decidió liberarlo.

En el comunicado, el grupo armado expresa: «El Frente de Guerra Norte tiene comandos con misiones económicas y uno de ellos realizó una privación de la libertad, que al ser reportada y verificarse que se trata del padre de Lucho Díaz, se orienta su liberación por ser un familiar del gran deportista que queremos todos los colombianos».

Asimismo, se subraya la intención de evitar cualquier incidente durante el proceso de liberación.

El ELN enfatiza que esta acción busca «los caminos de paz, con las transformaciones necesarias que el país necesita». Inicialmente, la madre del futbolista también fue secuestrada, pero posteriormente fue liberada y abandonada en la camioneta en la que se desplazaba junto a su esposo, quien no corrió con la misma suerte.

La noticia ha generado diversas reacciones a nivel nacional e internacional, todas con un rechazo unánime hacia el suceso. Se ha planteado la incertidumbre sobre si el Frente de Guerra Norte del ELN está desobedeciendo la orden del comando central de liberar a Díaz, que ya había sido emitida.

Otty Patiño, jefe negociador del Gobierno en las conversaciones con el ELN, confirmó el jueves 2 de noviembre la responsabilidad del grupo armado en el secuestro de Luis Manuel Díaz y Cilenis Marulanda, padres del jugador colombiano. Horas después, Juan Carlos Cuellar, gestor de paz del ELN, corroboró la declaración de Patiño y aseguró que la liberación se llevará a cabo «lo más pronto posible».