Este miércoles, poco después de finalizada la sesión en la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) sobre los casos de falsos positivos en Casanare, el expresidente Álvaro Uribe Vélez emitió comentarios sobre lo sucedido en la diligencia. El exsenador y líder honorario del partido Centro Democrático expresó su desacuerdo con los militares que comparecieron y con el tribunal de paz.

Durante la audiencia, el general retirado Henry Torres Escalante, ex comandante de la Brigada 16 del Ejército Nacional, admitió ante la JEP su implicación en los casos de falsos positivos. Sin embargo, negó haber ordenado la muerte de personas inocentes.

En relación a las declaraciones de los comparecientes acerca de la presión por obtener resultados, Uribe Vélez comentó: «Alegan como justificación que se exigían resultados, expresan que yo era muy exigente».

No obstante, el ex mandatario aseveró que atendió las denuncias sobre violaciones de derechos humanos y que su gobierno implementó medidas como «no mover los cuerpos dados de baja». Aseguró que en total se llevaron a cabo 70 iniciativas de este tipo. Asimismo, recordó, como ha hecho en otras ocasiones, que destituyó a 27 altos oficiales en octubre de 2008 por casos de falsos positivos.

Además, Uribe Vélez enfatizó que impulsó las desmovilizaciones por encima de las bajas en combate. Detalló que durante sus dos mandatos se registraron 53,000 desmovilizaciones, de las cuales 18,000 fueron de guerrilleros y 35,000 de paramilitares. También señaló que se llevaron a cabo 36,363 capturas y hubo 13,992 bajas.

Finalmente, el líder criticó a la JEP y afirmó que los militares «nunca admitieron el delito y ahora lo hacen para beneficiarse de la libertad que les ofrece la JEP. El diseño de la JEP incentiva a reconocer incluso delitos que no se han cometido».