En una declaración conjunta, los negociadores del gobierno colombiano con los grupos EMC-FARC EP y ELN, Fabio Valencia Cossio y José Félix Lafaurie Rivera, han urgido a un acuerdo entre ambos grupos para detener los enfrentamientos que están causando graves daños a las comunidades urbanas y rurales. Consideran inaceptable que estos combates continúen mientras se negocia la paz.
La petición se ha dirigido al comisionado de Paz, Iván Danilo Rueda, así como a los líderes del ELN y EMC-FARC EP, alias Pablo Beltrán y alias Andrey Avendaño, respectivamente. En la carta, los negociadores señalan que actualmente comunidades étnicas, territoriales, campesinas y otros grupos vulnerables están sufriendo las consecuencias de los enfrentamientos entre los Grupos Armados Organizados (GAO). Esto sucede a pesar de que ambas facciones están participando en diálogos de paz con el Gobierno Nacional.
Los negociadores recuerdan las palabras del presidente Gustavo Petro, quien ha subrayado que cualquier negociación con grupos armados debe priorizar un cese de hostilidades hacia la población civil antes que un alto al fuego. La continua confrontación en los territorios ha llevado a desplazamientos masivos y confinamientos forzados, con una violación flagrante de los derechos fundamentales, incluyendo educación, salud, seguridad y libre movilidad.
Valencia Cossio y Lafaurie Rivera argumentan tres razones para esta invitación al cese al fuego entre ELN y EMC-FARC EP. En primer lugar, la protección de la población en los territorios, especialmente las víctimas de desplazamiento y violencia. En segundo lugar, la confrontación entre grupos armados en proceso de negociación complica la labor de la Fuerza Pública y puede obstaculizar los procesos de paz. Por último, la persistente violencia en varias regiones del país a manos de grupos que simultáneamente dialogan con el Gobierno socava la credibilidad de los procesos de paz. Concluyen que Colombia, marcada por la violencia y la desconfianza, necesita empezar a creer en la posibilidad de una paz duradera.
