El 2025 será recordado como el año en que Trey Yesavage pasó de ser una promesa del draft a un fenómeno histórico en el béisbol de Grandes Ligas. En apenas siete meses, el lanzador de los Toronto Blue Jays escaló desde Clase A hasta convertirse en protagonista absoluto de la Serie Mundial, donde impuso un récord de 12 ponches para un novato en el Clásico de Otoño.
Seleccionado por Toronto en la primera ronda del draft de 2024, Yesavage inició la temporada 2025 en el equipo Clase A de Dunedin en abril. Su dominio en la lomita le valió ascensos vertiginosos: en mayo fue promovido a Vancouver (Clase A fuerte), en junio a New Hampshire (Doble A) y en agosto alcanzó la Triple A con Buffalo. En julio fue invitado al Juego de Futuras Estrellas, consolidando su estatus como uno de los mejores prospectos del sistema.
El sueño se completó en septiembre, cuando recibió el llamado a Grandes Ligas y debutó con los Blue Jays. Un mes después, el joven de 22 años fue incluido en la rotación de postemporada, donde demostró temple y madurez dignos de un veterano. Su obra maestra llegó en el Juego 5 de la Serie Mundial ante los Dodgers, con siete entradas de dominio total: una carrera permitida, cero boletos y 12 ponches, cifra récord para un novato en la historia del evento.
Yesavage no solo guió a Toronto a un triunfo clave que los dejó a un paso del título, sino que encarnó la historia perfecta de superación y talento: del anonimato de las ligas menores al estrellato mundial en un solo año.
