El gobierno de Israel confirmó este miércoles 2 de octubre que dio por finalizada la misión de la flotilla “Sumud”, que tenía como objetivo llevar ayuda humanitaria a la Franja de Gaza. Entre las personas retenidas se encuentran dos ciudadanas colombianas, Luna Barreto y Manuela Bedoya, quienes alcanzaron a enviar mensajes alertando sobre su detención antes de perder comunicación. Ambas hicieron un llamado urgente de protección a las autoridades colombianas.
De acuerdo con el Ministerio de Asuntos Exteriores israelí, ninguno de los barcos logró ingresar a la zona de combate activa ni romper el bloqueo naval frente a las costas de Gaza. En un comunicado oficial, la cartera aseguró que todos los tripulantes fueron capturados “sanos y salvos” y serán trasladados a territorio israelí para luego ser deportados a sus países de origen en Europa.
Las autoridades israelíes calificaron la flotilla como una “provocación” con supuestos vínculos a Hamás y confirmaron que un último barco, aún en trayecto, no será autorizado a entrar en la zona marítima restringida.
Mientras tanto, organizaciones humanitarias y defensores de derechos humanos han pedido al gobierno colombiano realizar seguimiento consular inmediato y garantizar la protección de Barreto y Bedoya durante el procedimiento de deportación.
La operación ha generado controversia internacional. Diversos colectivos han señalado que la flotilla buscaba llevar suministros básicos a la población de Gaza, en medio de la grave crisis humanitaria que atraviesa el enclave palestino, y han rechazado las medidas de bloqueo impuestas por Israel.
Se espera que en las próximas horas las dos ciudadanas colombianas sean deportadas, mientras continúa la presión diplomática y el llamado de organizaciones internacionales para que se respeten los derechos de los activistas retenidos.
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