La empresa Claro Colombia cobró irregularmente y el reportó en centrales de riesgo de 217 mil usuarios de líneas celulares que nunca utilizaron sus servicios. Este caso ha puesto de manifiesto la corrupción y la negligencia que existen en muchas empresas en Colombia, demostrando que el comportamiento corrupto no es exclusivo del sector público.

Una investigación periodística realizada por el portal La Silla Vacía reveló que un aparente desorden administrativo en la compañía de telecomunicaciones más grande del país afectó a más de 200 mil usuarios y, al mismo tiempo, ayudó a maquillar los ingresos y el número real de usuarios de la empresa.

El caso salió a la luz debido a un litigio laboral que se está resolviendo en la Sala Laboral del Tribunal Administrativo de Bogotá. La investigación reveló que los usuarios afectados eran propietarios de líneas adquiridas con servicios pospago, y aunque la empresa debería haber desactivado los números después de 87 días de mora para detener los cobros, continuaron facturando a pesar de que los usuarios ya no contaban con los servicios.

De las 217 mil líneas afectadas, 1.402 aún seguían activas en 2021 según los registros entregados por Claro en el proceso legal. La compañía afirmó que no causó perjuicio a los usuarios debido a los cobros indebidos, pero las pruebas presentadas revelaron las irregularidades administrativas que afectaron la vida crediticia de casi un cuarto de millón de personas.

Este incidente muestra un patrón repetitivo por parte de Claro, un gigante de las comunicaciones mexicano que maneja 37 millones de líneas en Colombia. Anteriormente, la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) ya había sancionado a Claro por no cancelar servicios cuando los usuarios lo solicitaban.

El conflicto se inició en 2018 entre Claro Colombia y cinco exempleados, quienes revelaron en correos electrónicos internos que desde 2013 se estaban facturando servicios no prestados a los usuarios. Aunque las líneas ya no funcionaban, la falta de reporte de desactivación continuó generando facturación indebida.