Todo parecía una tarde normal en Bogotá, con trancones, aguacero y antojo de pollo apanado… hasta que el pollo más famoso del país se salió del corral.
Testigos del CC Gran Estación aseguran que la mascota de Frisby fue vista coqueteando descaradamente con una vigilante del lugar. El pollo —con su pechuga inflada y alas alborotadas— no dejaba de lanzarle ojitos de salsa y hacerle corazoncitos con las plumas.
«¡Yo vi cuando el pollo le ofreció una presa!» dijo una señora que llevaba una caja de alitas y el chisme fresco.
Pero lo que parecía solo un inocente “pique” se convirtió en pollo al rojo vivo cuando llegó Frisbylina, la inconfundible gallina empoderada de la marca, y se armó el sancocho.
«¿Con que aquí estás, plumas flojas? ¿Así es como andás repartiendo papas y amor?», gritó Frisbylina mientras le jalaba las crestas al susodicho.
La pobre vigilante quedó paralizada, sin saber si correr, pedir refuerzo o pedir combo 3 con gaseosa. El pollo intentó escapar bailando bachata, pero Frisbylina lo interceptó con un giro de cadera y una amenaza:
—»¡Te me vas derechito a la freidora del olvido!»
Los clientes aplaudieron, algunos grabaron, y otros aprovecharon la confusión para pedir una presa extra.
Frisby aún no se pronuncia oficialmente, pero en redes ya circula el hashtag:
#PollosNoFieles 🐔💔
Y como dice el viejo dicho… «donde come uno, no se coquetea con la vigilante.»
Enlace del video