Teófilo Gutiérrez, tercer máximo goleador en la historia del Junior con 94 tantos, regresó al club con una convicción firme: conquistar títulos y demostrar que sigue siendo el mejor jugador del fútbol colombiano.
«Nunca dudé, siempre se lo pedía a Dios. Lo veía lejano, lloraba en mi cama, mi esposa me preguntaba qué tenía. Veía los partidos del Junior y sudaba, le hacía fuerza a mis compañeros y al cuerpo técnico. Este es un sueño hecho realidad», expresó el delantero, quien aseguró que su regreso es un «regalo de Niño Dios» que esperaba desde 2021.
Teo también tuvo palabras de reconocimiento para el técnico César Farías, agradeciéndole por su papel en su retorno y pidiendo apoyo para él, destacando su capacidad como entrenador.
Aunque su contrato es por seis meses, afirmó que su prioridad es disfrutar y ser feliz con el equipo. En sus primeros entrenamientos elogió a los jóvenes talentos del plantel y a veteranos como Carlos Bacca, Didier Moreno, Yimmi Chará, Déiber Caicedo, José Enamorado, Santiago Mele y Jefersson Martínez.
«Cuando el entrenador decida, voy a ponerme esa camiseta que tanto amo», aseguró el atacante, dejando claro que su objetivo es liderar al equipo hacia el éxito.
Gutiérrez subrayó la importancia de que Junior mantenga su identidad de juego y protagonismo en cada torneo. “Tenemos que mostrar buen fútbol y jerarquía. Junior siempre ha sido protagonista, ahora tenemos la Copa Sudamericana y no vamos a dejar pasar la oportunidad. Mi objetivo es ser campeón”, enfatizó.
Finalmente, dejó claro que su edad no es un obstáculo para su rendimiento. “Tengo 39 años, pero sigo siendo el mejor jugador del fútbol colombiano. Lo dicen las estadísticas y se lo demuestro a quien sea”, sentenció.
