Con el anuncio del primer parque eólico costa afuera de Latinoamérica, Barranquilla entra a las grandes ligas de construcción de infraestructura ‘offshore’.
Así lo aseguró el alcalde Jaime Pumarejo Heins, quien se refirió a que será una oportunidad para la región en la medida en que promoverá independencia energética —que, a largo plazo, implica menores costos—, energía de calidad y atracción de inversión al territorio.
Para poner en perspectiva el primer gran proyecto, el alcalde explicó que “vamos a ubicar molinos de viento afuera de nuestras costas. Son torres que promedian hasta 100 metros de altura, con aspas que pueden llegar hasta los 60 metros, con vientos de 9-13 metros por segundo. Es un proyecto de gran envergadura, que nos va a permitir tener la mitad de nuestro consumo y lo vamos a poder producir con energía eólica”, explicó.
Se trata de una obra para la cual el Distrito no aportaría recursos sino cooperación técnica que, desde hace dos años, han venido gestionando la empresa Alumbrado Público de Barranquilla (APBAQ) y la Oficina de Relaciones Internacionales de la Secretaría de Desarrollo Económico, en articulación con el Gobierno danés y Copenhagen Infrastructure Partners, una firma de 19 billones de dólares en activos.
Dicha articulación se materializó con la firma del memorando de entendimiento entre CIP y APBAQ, a través del cual la compañía danesa hará una inversión de 1 billón de dólares, aproximadamente, en 350 megas, planificados para llegar hasta 500 en un área en Barranquilla y el Atlántico frente a nuestras costas, y esto implica una mejora en términos de “energía de calidad” y “soberanía energética”, según explicó el mandatario distrital.
“La ganancia para Barranquilla, más que monetaria, es tener tranquilidad y soberanía energética. Además, cumpliremos con nuestro cometido: producir energía de manera limpia, que esto sea un buen negocio para la ciudad y que redujera nuestra dependencia con el resto del país, lo que a largo plazo ayudará a bajar costos.
En primera instancia, se promoverá energía de calidad a través de fuentes renovables al hacer uso del viento constante de la ciudad, lo que permitirá generar energía a un costo competitivo frente a las hidroeléctricas.
Eso le da a la ciudad, por una parte, soberanía energética, ya que tradicionalmente Barranquilla ha dependido de los ciclos hídricos del interior del país. En cambio, los ciclos de los vientos son muchos más estables en el Caribe.
Para el alcalde “esto es muy importante para la región, porque nos permite tener costos más estables a largo plazo, lo que debe redundar en valores más bajos de transmisión, de generación y, por ende, una factura más baja”.
Este 2022 empezaría la etapa de prediseño y de diseño, que durará aproximadamente dos años, en la cual se gestionarán los permisos a nivel nacional, se terminará de diseñar la infraestructura y se estudiará la viabilidad de la interconexión.
Otro de los grandes ejes, en términos de transición energética, se implementará a partir de proyectos como la generación de energía solar (que se encuentra en marcha y que comenzará con la instalación de paneles solares en edificaciones públicas), así como la Ruta del Hidrógeno que el Gobierno nacional lanzó el año pasado desde Barranquilla.
“Se ha detectado que en La Guajira, Magdalena y el Atlántico son los sitios donde más barato se va a producir hidrógeno en el país, así que a largo plazo también será una gran industria que se va a ver beneficiada por las inversiones que se están anunciando”, dijo Pumarejo.
En el marco de CERAWeek, el alcalde Jaime Pumarejo también sostuvo una reunión con Ana Duque, Country Chair de Shell Colombia, Centroamérica y el Caribe, con el fin de afianzar el acercamiento institucional de Barranquilla con uno de los más grandes jugadores del sector ‘Oil & Gas’.
Para el secretario de Desarrollo Económico, Ricardo Plata Sarabia, este tipo de encuentros “reafirman el potencial del territorio para eventuales exploraciones ‘offshore’. Asimismo, trabajamos en buscar soluciones naturales para la captura de carbono en los distintos proyectos que tendrían a Barranquilla como epicentro de servicios asociados a esas actividades”.