Los Dodgers de Los Ángeles dieron un paso firme hacia el título de la Serie Mundial al vencer 4-2 a los Yankees de Nueva York en el Juego 3, celebrado en la Gran Manzana. Con esta victoria, los Dodgers se colocan a solo un juego de consagrarse campeones, manteniendo su dominio con una ventaja de 3-0 en la serie.
Freddie Freeman destacó desde el inicio, igualando el récord de George Springer al conectar un jonrón en cinco juegos consecutivos de Serie Mundial. En la primera entrada, Freeman conectó un batazo de dos carreras ante Clark Schmidt, lo que le dio a los Dodgers una temprana ventaja de 2-0. Freeman se une a un exclusivo grupo que incluye a Hank Bauer (1958) y Barry Bonds (2002), quienes también lograron jonrones en los primeros tres juegos de una Serie Mundial.
Mookie Betts amplió la ventaja en la tercera entrada con un sencillo productor, y Kike Hernández añadió otra carrera en la sexta entrada con otro sencillo al jardín central, consolidando el marcador a 4-0.
Pese a un intento de remontada en la novena entrada, los Yankees solo pudieron sumar dos carreras gracias a un jonrón del jardinero Alex Verdugo. La ofensiva de los Yankees fue insuficiente para superar la sólida ventaja que los Dodgers construyeron desde el inicio.
La serie se trasladó a Nueva York tras los primeros dos triunfos de los Dodgers en Los Ángeles. Con el Juego 4 a la vuelta de la esquina, los Yankees están en una posición crítica, tratando de evitar una barrida que sería histórica. Aunque aún tienen una pequeña oportunidad de convertirse en el segundo equipo en revertir un déficit de 3-0 en la postemporada de MLB, las estadísticas favorecen a los Dodgers, quienes han ganado en el 84% de las series tras tomar una ventaja de 2-0.
El próximo juego será decisivo para ambos equipos, en un enfrentamiento que continúa cautivando a los fanáticos del béisbol.