Más del 25% de las viviendas en Gaza han sido arrasadas o han sufrido perjuicios durante la actual ofensiva de Israel contra Hamás. Esta cifra equivale a más de 98.000 unidades residenciales, representando una cuarta parte del total en la franja palestina.

El informe diario de la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU, sobre la situación desde los ataques terroristas del 7 de octubre, advierte que esta estimación es cautelosa. Esto se debe a la imposibilidad de acceder a áreas fuertemente afectadas por los bombardeos, especialmente en la ciudad de Gaza.

Solo durante la noche del 17 al 18 de octubre, al menos 25 personas perdieron la vida tras la demolición de un complejo residencial en Al Bureij (Gaza central). Varios otros enfrentaron una suerte similar en Jabalia, ubicada al norte de la franja.
La coordinadora humanitaria también reporta, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), 59 ataques a instalaciones sanitarias, con un saldo de 491 fallecidos. Esto incluye los 471 registrados en el hospital de Al Ahli, alcanzado por un misil el martes pasado.

Adicionalmente, 170 centros educativos han sufrido daños, incluyendo 20 utilizados por la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina (UNRWA). Asimismo, un edificio universitario, siete iglesias y once mezquitas han sido afectados.