El atrio de la iglesia del municipio de Usiacurí, se vio severamente afectado tras un intenso aguacero que azotó la región el pasado sábado. La cantidad de lluvia caída provocó el colapso del terreno, generando preocupación entre los feligreses y las autoridades locales.

El párroco de la iglesia, Emigdio Cantillo, informó que el aguacero continuó durante más de dos horas, lo que llevó al cierre preventivo de esa sección del edificio religioso. «Los servicios litúrgicos se han llevado a cabo, pero la parte afectada ha sido cerrada y estamos utilizando las puertas laterales para el ingreso de los fieles», afirmó Cantillo en una entrevista con Zona Cero.

El Arzobispo de Barranquilla, Monseñor Pablo Salas, realizó una visita a la iglesia durante el fin de semana para evaluar de primera mano la emergencia. En ese sentido, agradeció la pronta acción de las autoridades municipales para abordar el problema y solicitó la intervención del Gobernador Eduardo Verano para garantizar la seguridad estructural del templo.

La situación ha generado preocupación entre los habitantes de Usiacurí, quienes esperan una pronta solución por parte de las autoridades locales y regionales para restaurar el atrio central de la iglesia y garantizar la seguridad de los fieles que asisten a este importante lugar de culto.