En el marco del proceso judicial por lavado de activos y enriquecimiento ilícito que enfrenta Nicolás Petro, el fiscal a cargo, Mario Andrés Burgo, ha solicitado una investigación sobre el abogado del hijo del presidente, Diego Henao. La petición surge a raíz de supuestas maniobras dilatorias durante la presentación del escrito de acusación, que tuvo lugar el pasado lunes en el juzgado segundo penal especializado de Barranquilla.

Durante la audiencia, Petro expresó su preocupación, alegando que sus «garantías procesales fueron cercenadas». La defensa de Petro Burgos impugnó la competencia territorial del proceso, argumentando que las diligencias deberían trasladarse a Bogotá, ya que, según la tesis del ente acusador, la mayoría de los presuntos delitos se habrían cometido en la capital.

Sin embargo, el fiscal Burgo desestimó la impugnación al considerar que la defensa «no hizo una petición en concreto» y la calificó como «superflua, sin argumento y dilatoria del procedimiento». El juez Hugo Carbonó también llamó la atención al abogado suplente de Sebastián Henao, advirtiendo sobre la importancia de actuar conforme a la lealtad procesal y los principios del código de procedimiento penal.

«Se hace un llamado a la defensa para que, de acuerdo con la lealtad procesal y los principios que rigen el código de procedimiento penal, no propicie dilaciones o demoras en los procesos. Si la Corte devuelve este proceso por competencia, este juzgado le compulsará copias disciplinarias al doctor Sebastián García Rincón inmediatamente cuando se asuma la continuación de la competencia», explicó el juez Carbonó.

Estas tensiones procesales arrojan sombras sobre el desarrollo del caso y destacan la importancia de mantener la transparencia y la eficiencia en los procedimientos judiciales relacionados con casos de corrupción y lavado de activos. La investigación sobre las supuestas maniobras dilatorias añade un nuevo elemento de complejidad a un caso que ya ha capturado la atención pública.