El Servicio Meteorológico Nacional declaró una emergencia por inundaciones repentinas en Ruidoso, Nuevo México, tras una intensa tormenta eléctrica que provocó un alarmante incremento de seis metros en el nivel de los ríos en solo media hora. La situación ha sido calificada como “potencialmente mortal”.
Varias zonas del municipio han recibido órdenes de evacuación inmediata, mientras los equipos de emergencia trabajan al límite para atender cientos de llamadas al 911. Residentes atrapados en sus viviendas, vehículos arrastrados por la corriente y edificaciones derrumbadas o llevadas por el agua forman parte del dramático balance preliminar.
La rapidez con que se desarrolló la crecida tomó por sorpresa a muchos habitantes. “En cuestión de minutos el agua nos rodeó”, relataron vecinos afectados. Las autoridades han instado a la población a evitar las carreteras y buscar refugio en zonas seguras mientras continúan las labores de rescate.
Se espera que las lluvias persistan en las próximas horas, por lo que se mantiene el estado de alerta máxima. La prioridad ahora es salvaguardar vidas humanas ante un desastre que ya deja una profunda huella en la comunidad.