Un hecho de violencia ligado al cobro de deudas se registró en el sur de Barranquilla, donde un hombre y una mujer, señalados de ser cobradiarios, rompieron los vidrios de una vivienda a la que habían acudido a exigir el pago.
En un video que circula en redes sociales se observa a la pareja golpeando las ventanas de la casa, generando indignación entre los vecinos del sector. La comunidad no tardó en reaccionar: varios residentes increparon a los cobradores, los insultaron y, en medio de la tensión, incluso amenazaron con lincharlos.
Según testimonios de habitantes de la zona, este tipo de episodios no es aislado, pues aseguran que la presencia de cobradiarios se ha vuelto recurrente y que en muchas ocasiones actúan con intimidaciones y agresiones contra quienes no logran cumplir con los pagos.
Las autoridades locales aún no se han pronunciado sobre el hecho, pero la situación ha reavivado el debate sobre el crecimiento del llamado “gota a gota” en la ciudad y sus graves consecuencias sociales. Organizaciones comunitarias han reiterado el llamado a denunciar estas prácticas y a reforzar la presencia de la Policía en los barrios donde estos casos son más frecuentes.
Mientras tanto, en redes sociales el caso ha generado rechazo generalizado y un clamor ciudadano por frenar las extorsiones disfrazadas de cobros, que ponen en riesgo tanto a deudores como a vecinos que presencian este tipo de altercados.
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